Las muertes por accidentes de tránsito en Long Island aumentaron el año pasado a los niveles más altos desde 2015, a medida que la conducción peligrosa aumentó después de COVID-19 y la vigilancia policial del tránsito disminuyó, según un análisis de Newsday de datos sobre accidentes y multas y de expertos en tránsito.
Los accidentes se cobraron 243 vidas en 2022, un 29% más que en 2019, el año anterior a la pandemia, según datos del Instituto de Gestión e Investigación de la Seguridad del Tráfico de la Universidad de Albany. Eso es un promedio de casi cinco muertes por semana. Setenta y dos de los muertos eran peatones, frente a 60 en 2019.
Las muertes han seguido aumentando este año. Según la policía, las muertes por accidentes de tránsito aumentaron un 22% hasta agosto en comparación con el mismo período del año pasado en las jurisdicciones de los departamentos de policía de los condados de Nassau y Suffolk.
La policía informó cada vez más sobre comportamientos de conducción imprudentes, como velocidad insegura, cambios de carril y adelantamientos inadecuados, así como conducción distraída y alcohol, como factores en accidentes automovilísticos fatales.
La policía de Long Island vinculó la velocidad peligrosa, el principal factor que contribuye a los accidentes mortales, con 65 colisiones mortales el año pasado, frente a 44 en 2019, por ejemplo. La policía también informó de un aumento en los accidentes mortales relacionados con el alcohol, de 14 a 21.
Asimismo, hubo un 24% menos de arrestos de adultos por DWI, y un 18% menos de multas por exceso de velocidad el año pasado en comparación con 2019, según datos estatales analizados por Newsday.
Los expertos en tráfico dijeron que la aplicación de medidas policiales dirigidas a comportamientos peligrosos puede crear carreteras más seguras, junto con educación, campañas de seguridad pública y un mejor diseño de carreteras.
“Cuando el comportamiento cambia, los accidentes disminuyen”, dijo Hall, quien se jubiló como jefe de policía del condado de Roanoke, Virginia, en enero. «Los lugares que han implementado, a lo largo de los años, programas de aplicación de la ley que se centran en las infracciones que contribuyen a los accidentes y salen y los llevan a cabo, sus tasas de accidentes tienden a disminuir».
En comparación con 2019, el año pasado el Departamento de Policía del condado de Nassau emitió aproximadamente la mitad de multas por infracciones de conducción agresiva, definidas por el instituto Albany como cambios de carril inseguros, no ceder el paso, seguir demasiado de cerca y desobedecer los dispositivos de control de tráfico. El departamento emitió un 66% menos de multas por exceso de velocidad.
Los agentes del Departamento de Policía del condado de Suffolk emitieron un 14 % menos de multas por conducción agresiva y un 20 % menos de multas por exceso de velocidad.
Los funcionarios del departamento de policía de Nassau y Suffolk reconocieron que las multas disminuyeron después de la pandemia, pero señalaron que han aumentado cada año desde entonces. En entrevistas, los funcionarios dijeron que han reforzado los equipos que se enfocan en lugares peligrosos y comportamientos relacionados con accidentes, incluido el enfoque en conductores distraídos y con exceso de velocidad.
Si bien ambos departamentos atribuyeron la caída en las multas, al menos en parte, a una disminución en el tráfico después de que estalló la pandemia, el comisionado de policía del condado de Nassau, Patrick Ryder, dijo que los oficiales dejaron de emitir multas durante 2020, comenzando con el brote de COVID-19 y luego durante las protestas posteriores. el asesinato de George Floyd en Minneapolis, cuando a la policía se le asignaron otras tareas. Ahora, dijo, el departamento ha comenzado a “remotivar” a los agentes.
«A veces hay que tomar a esos jóvenes oficiales y remotivarlos. Durante seis, siete meses, les pedimos que no pongan multas. No escriban una multa, simplemente salgan y hagan cumplir las leyes lo mejor que puedan… Y luego arreglas las cosas, vuelves y nosotros te motivamos”.
El año pasado, Suffolk experimentó un aumento del 42% en accidentes fatales en comparación con 2019.
“Obviamente, como departamento, estamos preocupados porque estamos en el negocio de la seguridad pública”, dijo el jefe de patrulla de la policía del condado de Suffolk, Gerard Hardy.
Dijo que una caída en el tráfico debido al trabajo híbrido explicaba al menos parte de la disminución de las multas en comparación con los niveles previos a la pandemia.
Cuando se produjo la pandemia en marzo de 2020, la conducción disminuyó debido a que los trabajadores permanecieron fuera de la oficina y los lugares públicos cerraron. Los niveles de tráfico en Long Island cayeron un 16%, a 19,8 mil millones de millas recorridas en vehículos ese año, desde 23,5 mil millones en 2019, según datos proporcionados por el Departamento de Transporte del estado. En 2021, el tráfico de Long Island estuvo un 8 % por debajo de los niveles previos a la pandemia, mientras que el total de multas disminuyó un 34 % ese año.
Si bien los datos de tráfico de Long Island del año pasado no estaban disponibles, los expertos han dicho que el tráfico nacional y local se ha acercado a los volúmenes de 2019.
Las muertes habían disminuido en Long Island entre 2015 y 2019, pero a medida que la región se hundió en la pandemia en 2020, la conducción se desplomó y las carreteras más vacías crearon más oportunidades para exceso de velocidad. También surgieron y se han mantenido un mayor consumo de alcohol y drogas, combinado con crecientes problemas de salud mental y redes sociales fragmentadas, dijeron expertos locales y nacionales.
Está muy claro que algo en la psique colectiva se ha desintegrado en términos de conducción cuidadosa.
—Maureen McCormick, asistente especial de litigios de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Suffolk
«Está muy claro que algo en la psique colectiva se ha desintegrado en términos de una conducción cuidadosa», dijo Maureen McCormick, quien estableció las oficinas de delitos vehiculares del condado de Nassau y de la ciudad de Nueva York.
«No hay nada más violento que una muerte vehicular», dijo McCormick, ahora asistente especial de litigios de la Oficina del Fiscal de Distrito del Condado de Suffolk, que está trabajando en una legislación estatal para cerrar las lagunas jurídicas para conducir bajo los efectos de las drogas debido a un aumento en la conducción bajo los efectos del alcohol. .
Daniel Moran, psicólogo de Manhattan y director de formación clínica de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad Touro, dijo que durante la pandemia había una desconfianza generalizada en la autoridad y era menos probable que los conductores siguieran las leyes.
Dijo que los habitantes de Long Island están más centrados en llegar a donde necesitan ir que en los demás.
«Hay tanta gente alrededor que no tenemos nombre», dijo Moran. «No digo que seamos egoístas, porque también cuidamos de nuestras familias, pero no es probable que nos cuidemos unos a otros como comunidad».
Jawana Richardson de Hempstead se unió a Mothers Against Drunk Driving y se convirtió en defensora de la seguridad vial después de que su esposo, Sherman Richardson, de 59 años, fuera atropellado fatalmente por un conductor ebrio que se dio a la fuga en Southern State Parkway en 2014. La policía encontró y detuvo al conductor. Diez meses después, fue declarado culpable de homicidio involuntario.
«Definitivamente necesitamos más policías y autoridades en las carreteras», dijo Richardson. «Es demasiado fácil salirse con la suya».
La policía de Nassau y Suffolk dice que tiene más policías en las carreteras: 5.004 agentes actuales para ambos departamentos del condado, en comparación con 4.946 en 2019.
Este año ha habido una serie de accidentes horribles, que han privado a los padres de sus hijos e hijas, han dejado a niños huérfanos y han dividido a sus seres queridos.
En mayo, un conductor presuntamente ebrio que iba en sentido contrario en North Broadway en Jericho se estrelló contra un automóvil, matando a dos niños de Roslyn de 14 años, Ethan Falkowitz y Drew Hassenbein, cuando regresaban a casa después de una victoria en un partido de tenis.
En uno de los accidentes más mortíferos del año, cuatro miembros de la familia: el padre Patrice Huntley, sus hijos Jeremiah, de 10 años, y Hannah, de 13, y su nieta de 6 años, Chantel Solomon, murieron después de salir a tomar un helado. Fueron detenidos en un semáforo en rojo en Sunrise Highway en East Massapequa el 6 de agosto cuando un conductor, posteriormente acusado de estar bajo la influencia de cocaína y fentanilo, supuestamente se estrelló contra la parte trasera de su automóvil a 120 mph.
El conductor de 18 años fue arrestado por cargos que incluyen conducir sin licencia, conducir en estado de ebriedad y homicidio en segundo grado. Los fiscales dijeron que la policía olió a alcohol en su aliento y vio latas de cerveza dentro y al lado de su vehículo.
El número de personas menores de 18 años que murieron en accidentes en Long Island pasó de siete en 2019 a 13 en 2022.
A nivel estatal y nacional, el recuento total de muertes aumentó en 2020 y 2021, como en Long Island. Las tasas de muertes, basadas en las millas recorridas por los vehículos, también aumentaron y han sido más altas a nivel nacional que en Nassau y Suffolk.
La tasa de mortalidad en Long Island por cada 100 millones de millas recorridas en vehículos aumentó de 0,81 en 2019 a 1,08 en 2021, según datos del Departamento de Transporte del estado y del Instituto de Albany.
Pero a diferencia de Long Island, las carreteras a nivel nacional y estatal experimentaron una ligera caída en las muertes en 2022, según las primeras estimaciones de la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras.
Las estimaciones preliminares de abril muestran que 42.795 personas murieron en accidentes de tráfico el año pasado en todo el país, según la agencia federal.
“Lo más peligroso que uno hace todos los días es salir a la carretera, ya sea en un automóvil, como peatón o ciclista”, dijo Lorraine Martin, presidenta y directora ejecutiva del Consejo Nacional de Seguridad, un grupo de defensa sin fines de lucro con sede en Illinois. “De alguna manera, lo tomamos como el precio que hay que pagar para poder conducir en nuestro país. Pero no es el caso. Estados Unidos tiene una tasa de mortalidad mucho más alta que otras naciones industrializadas”.
Los agentes de policía enumeran los factores que contribuyen a cada accidente y puede haber múltiples causas para una colisión.
Hubo 228 accidentes fatales en 2022 en Long Island, en comparación con 175 en 2019. Algunos accidentes tuvieron múltiples muertes.
Además del aumento en los choques fatales que involucran velocidad peligrosa y alcohol, hubo un aumento en los choques fatales que involucran cambio de carril y adelantamiento, de 25 a 45.
La conducción distraída en accidentes mortales aumentó el año pasado, de 12 accidentes en 2019 a 21 en 2022. Además, los accidentes mortales de motocicleta aumentaron de 21 a 34.
Los esfuerzos de aplicación de la ley, al menos en forma de multas y arrestos por DWI, no han seguido el ritmo de los accidentes fatales.
El total de multas de tráfico emitidas en Long Island cayó un 22% de 635.343 en 2019 a 495.907 en 2022, según datos del instituto Albany.
Las multas por conducir bajo los efectos del alcohol en Long Island disminuyeron un 19 %, de 8,415 en 2019 a 6,816 en 2022.
Las multas por infracción de carril y cruce de líneas, en conjunto, disminuyeron un 42%, de 21,859 en 2019 a 12,602 en 2022.
Si bien Nassau experimentó reducciones similares en las citaciones generales que Suffolk el año pasado en comparación con 2019, Suffolk experimentó un mayor aumento en el número de muertes por accidentes de tránsito.
Las muertes por accidentes de tránsito y las multas son rastreadas en Long Island por varias agencias encargadas de hacer cumplir la ley, incluidos los departamentos de policía del condado, de la aldea y de la ciudad y la policía estatal, que reportan los datos al estado.
Cuando las personas infringen las leyes de tránsito, “en gran parte es porque no temen que los paren y les pongan una multa. Y por eso tenemos que recuperar la aplicación de la ley”, dijo Russ Rader, portavoz del Instituto de Seguros para la Seguridad en las Carreteras, con sede en Arlington, Virginia. Señaló que la aplicación de la ley había sido clave para aumentar el uso del cinturón de seguridad y reducir la conducción bajo los efectos del alcohol.
Ambos departamentos de policía del condado dijeron que identifican los lugares frecuentes de accidentes y se enfocan en las principales causas de accidentes graves, como conducir distraído, uso de teléfonos celulares, exceso de velocidad y no detenerse en los semáforos en rojo.
Hardy dijo que conducir distraído es probablemente el mayor problema, y señaló que los teléfonos celulares distraen tanto a los conductores como a los peatones, mientras que las nuevas pantallas del tablero desvían la atención de las carreteras.
Históricamente, las carreteras se construyeron para dar prioridad a los conductores sobre los peatones, pero la infraestructura debe adaptarse para proteger a los peatones, las personas en sillas de ruedas y los ciclistas, poblaciones consideradas vulnerables a los vehículos, dijeron expertos y defensores del transporte.
Suffolk experimentó un aumento en las muertes de peatones, de 31 en 2019 a 51 el año pasado. Nassau experimentó una caída en las muertes de peatones, de 29 en 2019 a 21, después de que 33 murieran en 2021.
Hasta Siempre.
CTsT=CAVP
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